Este artículo pretende concienciar un poco más a la sociedad. La gente normalmente no sabe lo que es una exploración neuropsicológica y llega a conocerla porque ha aparecido ya algún problema y es el médico quién solicita que se realice una. No obstante, en un futuro nuestro, puede ser de gran ayuda contar con una exploración realizada cuando estamos totalmente sanos.
Ante todo y contestando a la pregunta de por qué realizar una exploración: no existe una única razón para querer realizar una exploración neuropsicológica.
Lo más usual es que la gente se plantee realizar esta valoración porque se lo pida un médico. El médico tiene interés muchas veces en conocer el estado basal de sus pacientes. El estado basal se refiere a la situación base, inicial, la que se utiliza como punto de partida para medir cambios.
Disponer de una exploración neuropsicológica estando totalmente sano permitirá a tu médico saber si tu nivel cognitivo varía en caso de que estés experimentando cualquier cambio en tus habilidades mentales, ya sea tu memoria, tu atención, tu lenguaje, tu concentración… A tu médico le puede interesa saberlo antes de aplicar algún tratamiento para observar si hay cambios en tu rendimiento mental, o bien, para observar a partir de aquel momento cómo progresas en una situación determinada.
También es posible que hayas notado algún cambio en tu funcionamiento en la vida cotidiana. Una valoración neuropsicológica puede determinar con mayor precisión cuál puede ser el problema y ayudar en el diagnóstico médico. En este caso también suele ser el médico quien deriva al neuropsicólogo.
Puede pasar que quieras conocer simplemente tu rendimiento intelectual en esta etapa de vida y así poder determinar cuáles son tus fortalezas y debilidades. Es importante no confundir la exploración neuropsicológica con un test de inteligencia. Muchas veces la gente los pone en el mismo saco y son dos conceptos muy diferentes. El test de inteligencia está dirigido a calcular única y exclusivamente el cociente intelectual (CI) a través de distintas pruebas. La exploración neuropsicológica es más compleja y va más allá de los números. Es una herramienta de gran importancia para poder diseñar un plan de rehabilitación adecuado teniendo en cuenta el perfil cognitivo de la persona explorada, las funciones cognitivas que tiene preservadas y aquellas que son deficitarias.
Con la exploración neuropsicológica se pretende evaluar todas las funciones mentales y eso requiere un tiempo. Como todos nos fatigamos tras un período de tiempo de estar concentrados, normalmente los neuropsicólogos optamos por hacer las exploraciones en dos días.
Por todo esto, os animo a que alguna vez os hagáis una valoración a pesar de encontraros bien y estar sanos. Vivimos en una cultura centrada en el culto al cuerpo y es importante cuidar también nuestro cerebro. Mens sana in corpore sano, que se dice. Si quieres empezar a cuidarlo como es debido, lo primero y más importante es conocer bien como está ahora tu cerebro.